Lunes 10 de septiembre de 2012. Aquel lunes podía haber sido
simplemente un día más de vacaciones. Sin embargo, aquel día comenzaba una
nueva etapa para muchos de nosotros. Tras superar algún que otro obstáculo, mi
primer día como universitaria en la USJ estaba a punto de comenzar. Los nervios
se apoderaban de mí conforme llegaba la hora de conocer a los que sería mis compañeros
durante los próximos cuatro años. Sin conocer a nadie, con esa curiosidad por
no saber qué me iba a encontrar, con el miedo del novato, pero ilusionada y con
muchas ganas de comenzar a cumplir mi sueño: Ser periodista.
Charlas, presentaciones y primeras palabras con esas
personas que, como tú, se quieren dedicar al espectacular mundo de la
comunicación. Primer día universitario superado y con muy buenas impresiones.
Sábado 29 de junio de 2013. Mmmmm… ¿Qué ha pasado? ¿Quién ha
sido el encargado de adelantar el reloj hasta el día de hoy? ¿Cómo es posible
que mi primer año de universitaria ya haya terminado? Sin apenas darnos cuenta,
diez meses se han esfumado desde aquella jornada de bienvenida. Diez meses que
han parecido un mes de clases y el doble de tiempo de estudio intensivo… con
días muy duros, en los que te entran ganas de abandonar, de tirar por la borda
todo el trabajo y el esfuerzo cosechado hasta el día de hoy. Pero no lo haces.
¿Por qué? Porque ahí han estado todos y cada uno de ellos, simplemente
sacándote una sonrisa en cualquier momento de bajón o dándote un pequeño
empujón cuando en realidad ellos estaban igual o peor que tú.
Antes de aquel 10 de septiembre, por mi cabeza pasaban mil
cosas, pero si hay algo que nunca llegué a imaginar era que el Taller 13
estaría compuesto por personas de tan grande corazón. Todos muy distintos, con gustos
y opiniones diferentes, pero con una misma meta, con un mismo camino que
recorrer juntos… Mi segunda familia.
Gracias por este año, por ser como sois
